Las cardiopatías congénitas críticas son las responsables de más muertes en el primer año de un bebé que cualquier otro defecto de nacimiento. Para evitar esta realidad, médicos y científicos tienen el reto de crear pruebas fiables para la detección de un problema que afecta a uno de cada 120 bebés, de los cuales el 25% padece un trastorno grave. LEER MÁS