Los avances habidos en los diagnósticos y la mejora de los tratamientos facilitan que los menores venzan el tumor
La curación de los cánceres infantiles va en aumento. Así, ocho de cada diez niños, de cero a catorce años, superan el tumor que padecen. El índice de supervivencia (a los cinco años de hacerse el diagnóstico) de todos los tumores infantiles detectados en España se ha incrementado en un 43 por ciento en los últimos veinte años, a la par que se ha reducido en un 50 por ciento el riesgo de fracaso. Al año, se detectan en España unos 1.100 tumores infantiles.
Las causas de que las expectativas de curación sean más buenas hay que buscarlas en las nuevas técnicas diagnósticas, en las mejoras de los tratamientos y del trabajo investigador y asistencial que ejercen los pediatras especializados en oncología. A ello se une la labor de control y coordinación que desarrolla el Registro Nacional de Tumores Infantiles (RNTI) que puso en marcha en 1980 la Sociedad Española de Hematología y Oncología Pediátrica (SEHOP), integrada en la Asociación Española de Pediatría (AEP).
«En la actualidad –explicó Tomás Acha, presidente de la SEHOP y responsable de la oncología pediátrica en el Hospital Materno Infantil–, el pronóstico en los niños con tumores malignos es bueno, con una supervivencia a los cinco años de un 77-80 por ciento, que es más elevada que la que se consigue en los adultos». El doctor Acha precisó que esos datos esperanzadores se deben a la proliferación de nuevas técnicas incorporadas en el diagnóstico –sobre todo en el caso de los tumores cerebrales–, entre las que destaca la utilización de la resonancia magnética en el diagnóstico inicial y del PET (tomografía por emisión de positrones) para la valoración funcional de respuesta a algunos tratamientos o en caso de posibles recaídas, sin olvidar los avances en el tratamiento asistencial de esos niños. Esa evolución positiva se vincula, además, a un mayor control de los casos y una mejor captación de datos, recalcó Acha.
Pese a esta esperanzadora evolución, que sitúa a España en la media de la Unión Europea en índices de tumores infantiles, «el cáncer sigue siendo la primera causa de muerte por enfermedad en niños menores de 14 años», subrayó la presidenta de la Federación Española de Padres de Niños con Cáncer (FEPNC), Pilar Ortega. Por eso, la federación apoya desde hace años la reivindicación histórica de la AEP y la SEHOP para que se reconozca oficialmente la especialidad de oncología pediátrica.
«Para los pediatras españoles es fundamental la figura del especialista pediátrico en el cuidado del menor, más aún en patologías tan graves como los tumores», destacó Luis Madero, presidente de la Fundación Española de Pediatría. En su opinión, «es necesario reconocer la especialidad de oncología pediátrica para favorecer la investigación y dedicación asistencial a estos niños y adolescentes, ya que son estos profesionales los mejor formados para abordar sus problemas y para garantiza una correcta atención integral».
A ese respeto, Tomás Acha recalcó que todo paciente en edad pediátrica tiene derecho a ser asistido en instituciones que dispongan de los medios necesarios y por personal sanitario suficientemente cualificado en hematología y oncología pediátricas. El doctor Acha comentó que el seguimiento de los niños aquejados de cáncer hasta su desarrollo completo es otra de las reivindicaciones de los pediatras. «Por eso, hemos acogido con satisfacción la reciente ampliación hasta los 18 años de la edad de atención pediátrica en unidades hospitalarias», dijo Acha.
FUENTE: DIARIO SUR